Pachico Tejada
Santo Domingo
Lo de que figuras de la canción se pasen al cine es algo que no es nuevo. El hecho de que Ozuna esté rodando en suelo nacional “Que León”, segundo largometraje que dirige Frank Perozo, inspira a realizar un paseo por la historia de varios cantantes que se han pasado a la actuación.
Lo primero que ha de decirse es que el cine ha sido para muchos cantantes de éxito una forma de aumentar la popularidad y darle a sus seguidores la oportunidad de verlos más allá de disfrutar de su voz. Esto claro, en la primera mitad del siglo XX, cuando aún no existía al video clip y mucho menos las redes sociales para que el público tuviera contacto con las estrellas.
Fue este el caso de Carlos Gardel, el mítico cantante de tangos, quien apareció en películas como “Las luces de Buenos Aires” (Adelqui Millar, 1931), “Melodía de arrabal” (Luis Gasnier, 1932) y “El día que me quieras” (John Reinhardt, 1935). En ellas Gardel no solo actúa, sino que también canta.
Este estilo será también representado en el cine de Hollywood, primero en los años 30, con la novedad del sonido en muchas películas musicales. De igual forma lo aprovecharon en México, donde en la época dorada de su cine brillaron estrellas de la canción como Pedro Infante y Jorge Negrete (“Dos tipos de cuidado”, Ismael Rodríguez, 1953). Posteriormente otros como Antonio Aguilar, Alberto Vásquez, Angélica María o Enrique Guzmán, seguirían esas películas en las que en cualquier escena podía empezar la música y echar a cantar, colocando un aspecto mágico a la comedia o drama que se proyectaba.
En Hollywood cantantes como Bing Crosby, darían el paso a la gran pantalla y serviría de inspiración para que Frank Sinatra, Dean Martin y Sammy Davis, Jr., quienes con Joey Bishop y Peter Lawford conformaron el “Rat Pack”, llevaran sus canciones y su humor a filmes como “Ocean’s Eleven” (Lewis Milestone, 1960) o “Robin and the Seven Hoods” (Gordon Douglas, 1964).
También, y aprovechando el éxito del rock and roll en la juventud de los años 50 y 60, el más popular cantante de ese momento, Elvis Presley, se pasó al cine con filmes como “Love Me Tender” (Robert D. Webb, 1956), “Jailhouse Rock” (Richard Thorpe, 1957), “Viva Las Vegas” (George Sidney, 1964), entre muchas otras.
Estos son algunos ejemplos de artistas de la música que han hecho más o menos un trabajo aceptable como actores de cine. Pero hay una serie de cantantes que han replicado su talento de lo sonoro a lo visual.
Es el caso de Miguel Bosé o David Bowie (“Tacones lejanos”, Pedro Almodóvar, 1991, el primero, y “The Man Who Fell to Earth”, Nicolas Roeg, 1976, el segundo son dos ejemplos).
Otro es Justin Timberlake, quien a su andar en la música ha colocado una carrera en el cine que le ha valido buenos reconocimientos (fue nominado al Oscar a Mejor actor de reparto por su trabajo en “The Social Network”, de David Fincher, de 2010).
Otros que han mostrado su talento en la actuación han sido Will Smith, quien pasó del rap a la intepretación de personajes como Muhamed Ali (“Ali”, Michael Mann, 2001), o en filmes de ciencia ficción como “I am a Legend” (Francis Lawrence, 2007). A este se une Cher, quien en 1988 se llevó el Oscar a Mejor actriz por su trabajo en “Moonstruck” de Norman Jewison.
En el plano local un artista que se dio a conocer primero en el mundo de la canción cuando estaba al frente de la banda Transfusión es Héctor Aníbal. El actor ha ido bordando una carrera que lo ha llevado a realizar personajes de acción (“Código Paz”, Pedro Urrutia, 2015) y dramáticos (“El hombre que cuida”, Alejandro Andújar, 2017).
ROLES Y TEMAS
En las imágenes tres ejemplos de artistas de la música que se pasaron al cine o que han llevado una vida parelela en cuanto a lo creativo. A la inzquierda, Héctor Aníbal en una escena de la película “El hombre que cuida”, de Alejandro Andújar. Arriba, Justin Timberlake en “The Social Network”, de David Fincher. Will Smith en “Men in Black 3”, de Barry Sonnenfeld.